A tres días de las elecciones, he decidido apoyar públicamente la candidatura de Verónika Mendoza. En las elecciones de 2016, participé en las elecciones del Frente Amplio y voté por ella. Luego, escribí un artículo en el Diario Uno pidiendo a los compañeros de izquierda y simpatizantes, sumar votos para que con ella como candidata presidencial, la izquierda se fortalezca y vaya unida al frente electoral.

Ofrecí también mi apoyo más allá de las urnas. Estuvo a punto de pasar a la segunda vuelta, pero no fue posible porque un sector de las izquierdas prefirió seguir su propio camino. Luego, el Frente Amplio se dividió, dejó de ser amplio y Verónika buscó casa nueva, pero no logró reunir las firmas para ese propósito.

Hoy, está nuevamente en la lid electoral y ojalá sea posible que pase a la segunda vuelta. No daré nunca un voto a las derechas. Creo que en estas circunstancias votar por ella es apoyar una esperanza que parte del pueblo tiene a pesar de la voluntad de división que demuestran las organizaciones de las izquierdas.

Me uno a tantos amigos y amigas en su deseo de ver triunfar a Verónika.